Aquí os dejamos nuestra 3ª Etapa del Camino Portugués a Santiago Por La Costa.
Comienza en Póvoa do Varzim, concretamente al pie del Muro de Azulejos realizado
por Fernando Gonçalves en 2004, en los que se representan escenas de la historia
de la ciudad.
Continuamos por el paseo marítimo en donde nos
vamos encontrando diferentes esculturas de personajes locales acompañados por el
suave vaivén de las olas besando la orilla.
Es temprano pero El Atlántico, ayudado por
algunos elementos decorativos, se nos muestra en todo su esplendor.
Hay veces en que caminamos sobre pasadizos de
madera desde donde percibimos el inconfundible olor a sal mezclado con el
perfume de las flores.
Es un camino pleno de marcas y simbolismos con
referencias tanto al propio Camino en sí como a otras ideas diversas.
Es una zona ventosa por lo que veremos
muestras del aprovechamiento de la energía eólica por medio de molinos de
viento. Nos gustó especialmente el que se encuentra en La Playa da Aguçadoura por
su emplazamiento y su vistosidad.
A la altura del Estela Golf Club, El camino se
aleja momentáneamente de la costa.
Llevándonos a conocer distintas capillas e
iglesias del interior. Muestra de ello La Iglesia de Apulia, dedicada a San
Miguel. Edificada en 1.945 en estilo neoclásico tiene dos altas torres
campanario a ambos lados del cuerpo principal, donde se encuentra la imagen del
patrono colocada dentro de una hornacina.
Muy cerca nos topamos con La Capilla de Ntra.
Sra. Da Caridade. De estilo barroco portugués, data del año 1.881. Presenta una
fachada bastante sencilla que combina el blanco encalado de sus muros con el
granito, enmarcando la puerta y delimitando el contorno del edificio.
Ya en Fão visitamos El Templo do Bom Jesus, de inicios del S. XVIII, ocupando el espacio de otro más antiguo.
En sus inmediaciones echad un ojo a una pequeña capilla, y a un palacete abandonado. Refrescaos con el agua de una fuente y disfrutad de la sombra de su alameda.
Todo ello poco antes de La Iglesia da
Misericordia del S. XVII con características
de la arquitectura manierista y barroca.
Y de As Alminhas do Cais erigidas en memoria
de las víctimas de un un naufragio de barcos que pasaban en esta parte regada por
El río Cávado.
Al que encontramos deslizándose bajo El Puente
Don Luis Filipe del S. XIX, obra de Abel
María Mota. Clasificado como Bien de Interés Público desde 1986, presenta un
tablero metálico asentado sobre pilares de granito.
Y ya entramos en Esposende. Una escultura
simbolizando El Camino nos da la bienvenida.
Y nos invita a conocer la localidad. Así, en
La Plaza do Municipio, visitamos La Iglesia da Misericordia, clasificada como Inmueble
de Interés Público. Construida en el S. XVI, junto con la anexa Casa da
Misericordia, con reconstrucciones posteriores.
Lo más interesante se encuentra en su
interior: La Capilla do Senhor Dos Mareantes del S. XVI, declarada Inmueble de
Interés Público y cuya decoración es una verdadera maravilla. Es de estilo
manierista, destacando la recargada talla dorada y blanca.
No muy lejos nos espera La Iglesia Matriz, construida a mediados del S. XVI, aunque con
remodelaciones posteriores. Presenta estilo neoclásico, con tres cuerpos. El
central cobija la puerta principal flanqueada por dos torres campanario
idénticas. En su interior tres naves separadas entre sí mediante arcos de medio
punto, siendo la nave central más ancha que las laterales.
En sus cercanías no paséis por alto la gran escultura dedicada al “Homem do Mar” de finales del S. XX, realizada en bronce por los hermanos Bom Pastor como homenaje a los marineros de Esposende y a todos aquellos que arriesgan sus vidas en el mar.
Todavía tenemos tiempo de retomar contacto con
el litoral, primeramente con el estuario del Río Cávado y más tarde
acercándonos hasta la playa, en cuyas cercanías destacan las grandes letras de
la ciudad y un fuerte con faro del que os contaremos más en la próxima entrada.
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