Esta vez os contamos nuestro paseo por Vitoria-Gasteiz. El nombre le viene dado porque fue fundada por Sancho VI, Rey de Navarra, sobre un antiguo poblado llamado Gasteiz.
Y ya desde el primer
momento nos vemos sumergidos en un ambiente histórico y cultural al ir
encontrándonos con edificios de piedra que nos hablaban de épocas pasadas.
Casa fuerte del S. XV
situada en la antigua muralla defensiva de la ciudad. En ella destaca su torre,
rematada por una corona de almenas. En la actualidad, alberga El Museo de
Ciencias Naturales de Vitoria-Gasteiz.
O El Palacio Del Marqués
de La Alameda construido en el S. XVIII, es el mejor exponente de la Arquitectura Barroca doméstica vitoriana. Fijaos en la curiosa decoración
pictórica que imita motivos arquitectónicos y en el gran Escudo de Los Urbina
en la esquina del edificio.
Callejeando estamos cuando en pleno Camino de Santiago por la ciudad nos sale al paso La Iglesia de San Pedro , de Estilo Gótico.
Considerada Monumento Histórico-Artístico Nacional se construye en el S. XIV sobre una anterior del S. XIII, adosada a la muralla. En ella destaca su imponente Torreón Barroco y La Antigua Portada Gótica, uno de los más destacados conjuntos escultóricos de Euskadi.
En el interior admiramos
la perfecta armonía de los arcos ojivales, las altas y luminosas naves gracias
a las coloridas vidrieras, y las bóvedas de crucería. También las diferentes
imágenes y El Retablo Policromado de Los Reyes Magos, obra Plateresca del S.
XVI.
A un paso se levanta El
Palacio de La Diputación Foral de Álava cuya fachada principal hace referencia
al Neoclasicismo tardío vitoriano con su columnata clásica de entrada y su gran
plaza ajardinada en la que se ubica el monumento al defensor de los fueros,
Mateo Benigno de Moraza.
Y, muy cerca también, la
majestuosa Catedral de María Inmaculada, Neogótica, conocida como La Catedral Nueva ya que se construyó en el S. XX visto el mal estado en el que se
encontraba La Catedral de Santa María.
Posee planta de cruz
latina, con cinco naves, girola y cripta. También hay que destacar las gárgolas
del exterior.
Por un lateral se accede
al Museo de Arte Sacro creado en 1999. La mayor parte de los objetos que forman
la colección de este museo procede de depósitos y donaciones. Entre todos estos
objetos destacan las estelas, las Andra Maris, los santos, las pinturas y los
retablos.
Y como quien no quiere la
cosa nos encontramos ya en La Plaza de La Virgen Blanca, uno de los puntos más
importantes de la ciudad. Un Monumento central conmemora la exitosa batalla
contra los franceses en La Guerra de la Independencia.
A través de ella
accedemos a La Plaza de España de Estilo Neoclásico, un cuadrado perfecto
porticado de 61 m de lado, presidida por La Casa Consistorial.
En las cercanías nos
rodean bonitos edificios de piedra y vistosos balcones y galerías como el que
alberga El Museo Memorial de las Víctimas del Terrorismo.
Ascendemos unos cuantos
escalones y nos encontramos delante de La Iglesia de San Miguel una de las más
antiguas de Vitoria-Gasteiz, declarada
Bien de Interés Cultural en 1995. Desde su emplazamiento tenemos una
amplia visión de La Plaza de La Virgen Blanca.
De factura
predominantemente Gótica, fue construida
entre los S. XIV y XVI sobre los restos de una ermita que se levantaba en la
misma ubicación. Entre sus arcos exteriores vemos La Hornacina de La Virgen
Blanca, patrona de los vitorianos.
Destaca La Portada Principal de finales del S. XIV. Es desde esta iglesia desde donde baja con un
paraguas el personaje Celedón cada 4 de agosto para dar comienzo a las fiestas
de la ciudad.
En sus inmediaciones, La
Plaza del Machete, que debe su nombre al cuchillón sobre el que se juraban los
cargos políticos de la ciudad, cuya réplica está expuesta en San Miguel, y la
bonita Calle de soportales de Los Arquillos.
No nos perdimos El
Palacio de Villa Suso construido en el S. XVI sobre la antigua muralla
defensiva de la ciudad. En él sobresalen la fachada principal, su
balcón-galería o la fachada norte con la heráldica de Los Salinas, siendo
utilizado en la actualidad como sede de congresos.
A un tiro de piedra se eleva La Iglesia de San Vicente ejemplar del Gótico vasco edificada sobre la antigua fortaleza de San Vicente, que defendía el extremo sureste de la villa. A sus pies podemos ver una Antigua Nevera construida en el S. XIX para abastecer de hielo a la ciudad.
Continuando el paseo por La Almendra Medieval que forma El Casco Antiguo de Vitoria nos topamos con El Palacio de Montehermoso
del S. XVI, antiguamente Palacio Episcopal y hoy en día Centro Cultural.
También con La Antigua
Muralla de la ciudad de finales del S. XI, creada como respuesta a la necesidad defensiva que la
ciudad requería y restaurada en estilo lombardo.
Pegadito a ella El
Palacio de Escoriaza-Esquibel nos lleva al Renacimiento y nos muestra una
original Fachada Plateresca repleta de bustos.
Y como quien no quiere la
cosa nos hallamos ya en La Plaza de Santa María en donde además de la fuente
que mana agua fresca destaca ya la silueta de La Catedral de Santa María.
Es sabido que el gran
novelista Ken Follett se inspiró en esta Catedral Gótica, del centro
de la ciudad y una de las edificaciones más llamativas del centro histórico de
Vitoria-Gasteiz, para narrar las historias de sus recientes y segundos “pilares
literarios", Un Mundo Sin Fin.
Aprovechando que estaban
en obras se nos permitió realizar un viaje en el tiempo para conocer los
entresijos de esta impresionante obra de arte.
Durante esta visita
guiada, ataviados con un casco de obra, recorrimos su superficie desde el
subsuelo. Así, pudimos conocer los diferentes niveles de la
catedral y ver en vivo y en directo los esqueletos de las tumbas, la vieja muralla milenaria que forma parte de
los cimientos, el remoto primer templo, ....
Iniciada su
construcción a finales del S. XIII,
prolongada en el S. XIV, La Catedral Gótica de Santa María se levanta
majestuosa en el casco antiguo de Vitoria-Gasteiz, edificada como
iglesia-fortaleza, de gran volumen, formando parte de la
defensa de la ciudad.
Desde una plataforma
elevada, pudimos contemplar de cerca los enormes arcos, las columnas, su
singular decoración, así como los medios usados para evitar su derrumbe.
Las esculturas
monumentales de la portada son de gran importancia artística. Destacamos El
Pórtico Occidental, verdadera obra maestra, dividido en tres portadas en la que
nos maravilla la del centro dedicada a la Virgen.
Y, aunque parezca mentira,
todavía no terminamos aquí la visita. Nos esperaba la bonita Plaza de la
Burullería rodeada por impresionantes edificios medievales, algunos de ellos
entre las edificaciones más emblemáticas de la ciudad como El Portalón del S. XV, La Casa Armera de los Gobeo-Guevara y San Juan del S. XVI.
También La Torre de los Hurtado de Anda,
edificio Gótico-renacentista de finales del S. XV, declarado Monumento
Histórico-Artístico en 1984. Hoy en día considerada el edificio civil más
antiguo de la ciudad y que formaba parte del sistema defensivo de
Vitoria-Gasteiz ya que era una de las torres que defendía la muralla norte.
No dejamos atrás El Palacio
de Los Álava Esquivel del S. XV ni La Ruta de Los Murales que se nos ofrecen a
cada paso en distintas fachadas de la ciudad, y otros momentos que dejamos que
los descubráis vosotros, pasito a pasito.
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