La ciudad de Pontevedra, con El Santuario de La Virgen Peregrina, será gran protagonista de esta nuestra 11ª Etapa del Camino Portugués A Santiago Por La Costa.
Que iniciamos al pie del Albergue de Peregrinos de Redondela sito en la llamada Casa de La Torre del S. XVI fundada por Los Prego de Montaos.
Enseguida llegamos a la N. 550 que cruzamos a la altura de La Capilla de Santa Mariña del S. XIX construida siguiendo el Estilo Barroco.
Al poco llegamos al Camino Real de Cesantes con frondosos árboles que nos ofrecen su sombra.
Y en seguida nos vemos en el Área Recreativa de O Viso con una fuente que nos refresca después de una ligera subida.
El camino es llevadero, con las pertinentes flechas amarillas y los correspondientes mojones señalando la distancia hasta Santiago.
También hay lugares en donde los peregrinos van dejando algún recuerdo de su paso.
Y esculturas y otros elementos decorativos que adornan El Camino.
Como quien no quiere la cosa estamos ya en Arcade en donde nos recibe la fresca agua de la fuente y lavadero de A Lavandeira.
Callejeamos por su casco y nos encontramos con un Banco Peregrino que nos invita al descanso.
Poco después nos encontramos con El Río Verdugo deslizándose bajo El Puente de Ponte Sampaio. De origen romano, pero de La Edad Media.
Hasta que arribamos a una bonita senda de altos y musgosos muros con estilizados árboles.
Que nos lleva a un puente metálico sobre El Río Ulló.
Para continuar camino por lugares en donde los caminantes van dejando lo mejor de sí.
En nada nos vemos en Bértola, delante de La Capilla de Santa Marta con fachada del S. XVIII aunque el resto pertenece al S. XVI. Fijaos en el arco de medio punto en su entrada. A su lado se yergue un pétreo cruceiro.
A pocos pasos nos recibe La Senda del Río Dos Gafos. Es una maravilla caminar por ella sorteando el río por sus pequeños puentes.
Bajo la gran variedad de vegetación en sus orillas, con sauces, robles, abedules, chopos, fresnos, alisos, castaños,…
Y a lo largo de la cual veremos muestras del buen hacer artístico de la gente de la zona.
Pasamos con misterio el túnel bajo las vías del tren.
Y visitamos El Albergue de Peregrinos en donde saludamos a estos compañeros que charlan animadamente.
Ya en la ciudad, Pontevedra, nos entretenemos en La Fuente de Los Niños con esculturas de Manuel Collazo Torres, inaugurada en el 2002.
Antes de visitar a La Virgen Peregrina en su capilla, construida a partir de 1778, en el centro histórico de Pontevedra. Presenta planta en forma de concha de vieira, símbolo de los peregrinos del Camino de Santiago, Declarada Monumento Histórico-artístico en 1982 mezcla un barroco tardío con formas neoclásicas.
Ni El Convento de San Francisco, del S. XIV, obra maestra del arte de las órdenes mendicantes declarado monumento histórico-artístico en 1896.
Dice el sentir popular que Pontevedra “É boa Vila e dá de Beber a quen pasa…” y así lo constatamos con las numerosas fuentes sementadas por doquier… Como la situada en La Plaza de Curros Enríquez. De hierro fundido bronceado, data del S. XIX y es una de las 4 iguales, existentes en la ciudad, que llegaron a la ciudad de la mano de Alejandro Rodríguez Sesmeros.
Que nos lleva al emplazamiento del Puente del Burgo, símbolo de la ciudad. Formado por once arcos rebajados de medio punto y realizado en sillería medieval sufrió modificaciones posteriores.
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