Y de nuevo nos hemos
encontrado con El Río Vez, cerca de Sistelo, Portugal.
Y lo hacemos caminando por un tramo nuevo de La
Ecovía del Río Vez, recién inaugurado que incluye nuevos pasadizos para estar
más cerca de las dulces aguas.
A las que ahora podemos
aproximarnos libremente, contemplarlas, refrescarnos y disfrutar de sus
cabriolas por estas tierras gracias a estos nuevos metros de madera que nos acercan
también a las alturas y a un cielo azul intenso.
Es una delicia aprovechar
los escalones, bajarlos y contemplar la
parte más traviesa del Río Vez jugando con las piedras de su lecho.
Al igual que ya hace mucha
gente aprovechando la orografía del terreno que permite la conocida como Zona
Fluvial Poço das Caldeiras en donde hasta la vegetación circundante se une a
la diversión.
Continúa su periplo el
caminante rodeado de frondosos árboles. Viejos molinos le salen al encuentro.
Sus pies lo llevan sobre
tierra o sobre las tablas de los pasadizos pero siempre con la compañía del líquido
elemento y algún que otro compañero adicional de fatigas.
Otro momento de distracción
sobreviene en Corneda al encontrar unos antiguos pasos de piedra sobre el río.
Que tienen continuidad
en el camino empedrado sobre el que el senderista se desplaza algo después.
Nuevamente se siente la presencia
del río cuyas aguas propiciaban la existencia de molinos en sus orillas. El paso
del tiempo es patente sobre sus paredes y tejados, a veces ruinosos.
Pero la elegancia de sus
estructuras sigue patente en la imagen que el caminante contempla, como en esta
Aceña da Chã.
A su vera, el río, y unos coquetos
pasos que los lugareños utilizaban para cruzarlo.
Hay que decir que El río
Vez se nos muestra muy variado a lo largo del recorrido con tramos en los que lo
vemos pacífico y sosegado y otros en los que pierde la compostura y se desmelena.
Momento importante
llegados al Puente de Vilela. Monumento de Interés Público desde 1990. Se
cree que data del S. XIII.
De Construcción típicamente Románica presenta dos grandes arcos de tamaño desigual con tajamar de perfil
prismático. Con su tablero de cantería, en caballete, permite cruzar el Vez de
una a otra orilla.
Por cierto que en la
margen izquierda encontramos una fuente y una almiña dedicada a Santa Lucía en
donde posiblemente habría existido una capilla erigida en su devoción.
La Ecovía del Vez hace
honor a su nombre no apartándonos de sus rumorosas aguas en cuyas orillas
siguen turnándose rápidos, represas y remansos.
No faltan las levadas, alguna
de ellas tapada, molinos, aceñas y norias que hacen las delicias del caminante.
También elementos que
incitan a parar unos minutos y disfrutar del río igual que lo haría un niño.
Como quien no quiere la
cosa nos fuimos acercando a Arcos de Valdevez. Nos recibe un Área Recreativa
con pérgola, zona de baños y “A Fonte do Piolho” posiblemente del S. XIX.
Desde allí, con el río
como protagonista, vamos atisbando la ciudad de Arcos de Valdevez y algunas de
sus iglesias.
Hay varios puentes que
nos trasladan de orilla a orilla. Nos atrevemos a cruzar algunos con El Vez y
la ciudad siempre en el punto de mira.
Dando así por finalizado
el refrescante paseo por La Ecovía del Río Vez.
CLICAR AQUÍ Y VER LA RUTA EN WIKILOC
CLICAR AQUÍ Y VER TODAS LAS FOTOS DE LA CAMINATA
No hay comentarios:
Publicar un comentario