El Centro Histórico de la ciudad portuguesa de
Oporto fue declarado Patrimonio de La Humanidad en 1996.
Este último domingo los senderistas del Blog
Grupo de Andainas Rías Baixas se dieron un paseo por este emblemático lugar
acompañando a La Associação dos Amigos do Rio Ovelha, de Marco de Canaveses,
también en Portugal, organizadora del evento.
El paseo comenzó muy temprano en una mañana envuelta
en la nieblina, en la estación de ferrocarril de Marco de Canaveses en donde
cogimos el tren que nos llevaría hasta Oporto.
Durante el trayecto, tanto a la ida como a la
vuelta, no faltó la animación musical proporcionada por Tosé y compañía haciendo
las delicias de todos los viajantes.
Y arribamos a La Estación de San Bento,
edificada a principios del S. XX en el lugar en donde había existido el
convento de S. Bento, de ahí su nombre. Construída con una cobertura de cristal
y vidrio, está considerada una de las más bonitas del mundo. Son característicos
los azulejos de su atrio ilustrando diversas escenas de la vida y la historia portuguesas.
De allí partimos hasta La Sé Catedral, magnífico
edificio, cuya construcción se inició en el S. XII sufriendo constantes cambios
a lo largo del tiempo, de ahí la gran variedad arquitectónica que se observa en
ella.
A su lado, una bonita Torre Medieval y "El Pelouriño" en donde se ejercía la justicia en otros tiempos.
Asimismo, La Estatua Ecuestre de Vimara Pérez, primer gobernador del Condado Portucalense.
Entre risas y alegrías, a través de estrechos
callejones y descendiendo Las Escaleras del Codeçal nos encontramos frente a
frente con la imponente figura del Puente de Luis I, el más famoso de Oporto,
sobre las aguas del Duero. Presenta dos niveles en un tejido de hierros que le
proporciona una gran esbeltez y elegancia.
Al otro lado, en Vilanova de Gaia, algunos
barcos rabelos, y en los Cais da Ribeira y también sobre el agua, una colorida
multitud de turistas disfrutando de un bonito recorrido fluvial.
Continuamos admirando diferentes lugares de este
Oporto tan sentido y llegados junto al Palacio de La Bolsa nos detenemos para
reponer fuerzas y tomar un poco de sol en Los jardines del Infante Don Enrique.
No dudamos en subir Las Escadas da Vitoria
para llegar al Mirador del mismo nombre y contemplar una preciosa panorámica de La Invicta.
Y callejeando, casi sin pensar, nos encontramos delante de La Plaza de
Lisboa. Allí, muy cerquita, La Iglesia del Carmen y La Fuente de Los Leones.
¡Ah! Y La Librería más conocida de Oporto, no
sólo aquí, sino en el mundo entero: La Librería Lello. Nosotros, esta vez, al
ser domingo, sólo la contemplamos por fuera, pero ya estuvimos en su interior y
realmente os la recomendamos.
¡Ah! Y también La Iglesia y La Torre de Los Clérigos!
¡Que no se me olvidaba, no! La Torre de los Clérigos, que data del S. XVIII,
es El Ex. Libris de Oporto, su monumento más representativo. Con sus 76 metros es indudable
que se hace notar, siendo visible desde muchos puntos de la ciudad.
Y de allí ya vamos dando término a nuestra
caminata pero poniéndole un gran broche de oro con todo lo que el caminante se
encuentra en La Avenida de Los Aliados.
La elegante decadencia de los edificios que la
rodean.
La Estatua Ecuestre de Pedro IV, y La Menina
Nua, con el telón de fondo incomparable de La Cámara Municipal de Oporto. ¡No
os lo podéis perder!
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