Y ya que Lorenzo parece que no quiere asomarse
este año por Pontevedra con su capa de rayos más ardiente, nosotros
aprovechamos para dar alguna que otra pateada y así poder seguir presentándoos
bonitos lugares para descubrir, recordar y admirar.
Esta vez no nos hemos ido muy lejos ni hemos
caminado durante mucho tiempo, que nuestro coche de San Fernando también quiere
un poco de reposo.

Y llega hasta
la Isla de Insuiña, o de Medal, al otro lado del río Verdugo, regresando al punto inicial
con un recorrido total de 6 km.
Como veis es una senda corta pero a mí me
parece llena de encanto y, como apreciaréis en las fotografías, con muchos y variados
elementos, tanto naturales como arquitectónicos, en donde recrear la vista y el
espíritu.
Nosotros comenzamos acercándonos hasta la punta misma del muelle de
Arcade en donde multitud de embarcaciones reposaban tranquilas en su lecho de
agua.
Y lo hicimos porque desde allí, incluso con el día brumoso como ayer se
nos presentó, se puede avistar a lo lejos el Puente de Rande, varias islas, como la isla de San Simón, e
islotes, el monte de La Peneda...
Y después no hicimos más que seguir la senda
que discurre al borde del agua, cruza debajo de la carretera por una pasarela
de madera y nos lleva en dirección hasta el puente de origen romano de
Pontesampaio.
Ya al otro lado del río giramos a la derecha
para visitar la casi desierta playa de A Xunqueira, y volviendo sobre nuestros
pasos recorremos un tramo del Camino Portugués a Santiago.
Ascendiendo
ligeramente, ya encontramos las señales blancas y amarillas que nos llevan
hasta isla Insuiña o de Medal, con un pequeño desvío opcional para visitar La Iglesia románica
de Santa María.
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